PRIMERO DE MAYO: CELEBRACIÓN
DEL DÍA INTERNACIONAL DEL TRABAJO
¿Dé
dónde viene esta celebración?
El
1º de mayo se celebra el Día Internacional del Trabajo, día en el
cual conmemoramos la jornada de los Mártires de Chicago. En 1884
se inicia un proceso que llevan en conjunto trabajadores de Estados Unidos y
Canadá para exigir jornadas laborales de 8 horas y así dejar atrás,
definitivamente, las extenuantes e inhumanas jornadas de 10, 12 y hasta 16
horas que debían resistir los trabajadores. Esta agrupación decide que la
jornada laboral de 8 horas se comenzará a desarrollar a partir del 1º de Mayo de 1886. Previo a esta fecha
ocurren varios hechos de violencia y represión por parte de las autoridades.
Este levantamiento culminó con sus líderes
muertos y no se consiguió la aprobación
de la jornada laboral de 8 horas hasta el año 1935. Este día lo celebramos para
recordar la lucha de hombres y mujeres que han dado su vida, a través de la
historia, para dignificar cada día el trabajo.
Los
trabajadores Chilenos en el 2008 ¿en qué están?
Para nadie es una novedad que nuestra sociedad capitalista neoliberal
regula desde la ley de la oferta y la demanda, que él que tiene el dinero
“manda”. Ya lo decía el Padre Hurtado en su tiempo: “…Los industriales, comerciantes
y patrones que prefieren reglar sus salarios por la ley de la oferta y la
demanda”Y
en nuestro país somos muchos los cobardes que dejamos caído y herido a los
hermanos porque vamos rápido a la
Iglesia, al mall, al “happy hour”. Definitiva y absolutamente el P. Hurtado no
fue un cobarde, el asumió la problemática de
los trabajadores, de su época y la sigue asumiendo hoy. A través de esta situación marcada por el
“mercado neoliberal”, los
trabajadores y trabajadoras, han perdido unidad, cohesión y sustento.
Pasando a ser “instrumentos”; uno más en la cadena, uno más excluido de la sociedad. Ya el P. Hurtado constataba
esta situación en su época al observar la realidad de los trabajadores, a los
cuales tan entrañablemente se entregó: “…La historia está llena de ejemplos de
explotación del obrero, al cual se ha hecho trabajar largas jornadas,
recibiendo en cambio salarios irrisorios. Desgraciadamente esta historia no
está terminada[2]…